En 2018, no hay excusas para el gobierno.

 Cuando Macri asume la presidencia en diciembre de 2015, la frase utilizada con mayor frecuencia para explicar cualquier medida económica y cualquier resultado negativo era "como dejo el Kirchnerismo el país"
 tomado esto también como una excusa valida, pues es cierto que tomo un país deteriorado, deficit fiscal elevado, cepo cambiario, país en de default, subsidios millonarios, inflación de las mas altas del mundo y todo sumado con una pobreza a casi 30% de la población. Algunas de las menciones, aun siguen vigente con el actual gobierno; ahora también es cierto que esa excusa fue perdiendo fuerza. Conforme va pasando el tiempo, al oficialismo se le atribuye mayor responsabilidad por la actualidad del país y esta bien que así sea, habiendo transcurrido ya 24 meses de gestión.

 En los  primeros dos años, Cambiemos tuvo un poder político acotado, no controlaba el congreso, ni las provincias. Todo cambió luego de las elecciones de medio termino, puesto que ahora consiguió mayores banca en las cámaras de diputados y senadores, y ganar las provincias mas importantes del país le significo un plus con el que tal vez, no contaban.

 En 2018, entonces, surge el interrogante de como utilizara el presidente, un poder reafirmado en las urnas, teniendo en cuenta que no habrá elecciones en disputa. Es el momento, es el año en que deberá de convencer, no solo en términos de expectativas, si no y sobre todo en resultados.